Jugamos como nunca y perdimos como siempre

Y ni siquiera jugamos como nunca. Eso sí, pasamos de los 15 disparos a portería, y aún así viene el Real Madrid y te enchufa un 1 - 4. Vaya kaos. Es lo que sucede cuando llega un equipo que juega en una liga que no es la tuya. Ellos debatiéndose por un título y nosotros intentando mantener la categoría. No pudo ser ni con uñas ni con dientes, o para los que aún les sigan llamando leones, ni con garras ni con colmillos ni con ná. Un ridículo en casa más. Confío en que al final nos salvaremos, y no creo que sea con la ayuda de Villar.

Por lo demás este ha sido un fin de semana tranquilito. El viernes en casa, película y helado incluidos. Esta vez tocó Pequeña Miss Sunshine, triunfadora inesperada de varios de los premios más prestigiosos de la crítica norteamericana y que no decepcionó. Una película sencilla, sincera y entretenida, un lujo para estar en el 2007. La escena final ha marcado ya una época. El sábado nada de madrugar y por la noche un clásico: un kinito sin kinito de los nuestros, un megakatxi, una copa más y a casa a dormirla. Sábado atípico y Domingo atípico. Fuimos a ver el partido, unas pizzas y unas enormes ganas de fiesta, pero la menda tenía que trabajar y no pudo ser...Quizá hoy sea el día, porque mañana tenemossssss HOLIDAY, el Día del Trabajador, algo que los españoles aprovechamos por supuesto para no trabajar, excelente.